Quedate En Madrid

Con la nariz entre tus ojos

y entre un pulmon y otro pulmon

el corazon y los congojos

todos en reunion.

Con tus orejas en las manos

voy ensenandole a Van Gogh

como mejora el resultado

cuando lo hacen dos.

Siempre los carinitos

me han parecido una mariconez

y ahora hablo contigo en diminutivo

con nombres de pastel.

Y aunque intente guardar la ropa

al mismo tiempo que nadar

me he resignado a ir en pelotas

mientras dure el mar.

Yo que de estas estampas

me limitaba a hacer coleccion

me hago un llavero con el fichero

con una condicion

el dia que tengas ojos rojos

y me estornude la nariz

vamos hacer lo que podamos

por cenar perdiz

quedate en Madrid.