Billy El Pistolero

En el asiento de un coche antiguo,

abandonado en un desguace en el olvido

con un canuto entre los dedos, cara de malo

y con sombrero de vaquero y su pistolera

que le dan miedo y en su cuerpo

no cabían ya más secuelas

de chinas que le cayeron.

Siempre decía gritando al cielo

que algún día sería

tan niño como fue Billy el pistolero.

Que en su caballo cabalgaba to los días

y desde su barrio hasta la plaza de la alegría

donde encerraba el pasado dentro de una papelina

donde soñar es tan caro como barata es la luz del día.

Fueron figura de la amargura

bebia a pelo pequeñas dosis de locura

se confesaba en un estanco iba a la iglesia

pa fumarse uno a uno to los pecados

papel de biblia liado, sin darse cuenta llegó a la meca

de tos los desamparados.

Siempre decía gritando al cielo

que algún día sería

tan niño como fue Billy el pistolero.

Que en su caballo cabalgaba to los días

y desde su barrio hasta la plaza de la alegría

donde encerraba el pasado dentro de una papelina

donde soñar es tan caro como barata es la luz del día.

Siempre decía gritando al cielo

que algún día sería

tan niño como fue Billy el pistolero.

Que en su caballo cabalgaba to los días

y desde su barrio hasta la plaza de la alegría

donde encerraba el pasado dentro de una papelina

donde soñar es tan caro como barata es la luz del día.

Que en su caballo cabalgaba to los días

y desde su barrio hasta la plaza de la alegría

donde encerraba el pasado dentro de una papelina

donde soñar es tan caro como barata es la luz del día.