El Amor De Una Madre

Mírales... sólo un ciego no puede ver

Las palabras de amor a través de su mirada

el dolor atenaza el jóven corazón.

Ella le da su amor, pero eso no le basta...

Y le pidió que acabara pronto

con todo el dolor que su alma aguantaba.

Él decidió que la madre que una vez vida le dió,

ahora se la quitara.

El dolor también era su dolor, sin poder ayudar

a un hijo que se ahogaba...

Decidió, sin pensar en ley o en Dios,

sólo una razón: su hijo la necesitaba.

Le acompañó hasta el cielo.

De la mano le llevó; el dolor amainaba...

Él la miró y apretándole la mano, sonrió.

Su vida se apagaba...

Se la juzgó: ni el jurado ni la gente

comprendió lo que ella intentaba...

No hay compasión.

La llamaban asesina y , en prision,

una madre lloraba...